Por MIGUEL A. GARCÍA COTO
Factores que podrían influir en la variabilidad expresiva de cada persona/
Podemos encontrar dentro de los niños diagnosticados según el DSM 5 una gran variabilidad expresiva, que en algunos casos podría encuadrar en las variedades clínicas descriptas en los subtipos de Wing. En algún momento se comenzó a hablar de síndrome (ver también Asperger), y esto es fundamental pues a medida que podemos ir tomando modelos neuropsicológicos que nos permiten otras lecturas de la conducta podemos identificar disfunciones cada vez más específicas que requieren también intervenciones focalizadas. Hablar de síndrome implica aceptar que tal vez el autismo puede ser a la clínica psicopatológica algo así como la fiebre a la clínica general (Charles K. Wing): son muchos los trastornos que se presentan con fiebre, luego descubrir la fiebre es solo el comienzo de la exploración. Entonces: encontrar signos de autismo en un niño: ¿no es nada más que comenzar una exploración que nos lleve a entender que es lo que en realidad le pasa a ese niño?. Me parece interesante tener en cuenta esta postura semiológica que nos lleva a considerar que: No hay un autismo, hay muchos autismos. Y TODOS LOS QUE REQUIERAN TRATAMIENTOS