Conductas Disruptivas: Claves de manejo

Algunos principios básicos para el manejo de la conducta de niños que parecen no compartir códigos tanto con sus pares como con los adultos.

Para uso de padres, educadores, terapeutas y otras personas que tengan a su cuidado al niño.

Miguel Angel García Coto
( Abril2016)

He tomado los consejos (casi todos) que Martin Kutscher les da a los adultos que tratan con niños con conductas problemáticas y con síndromes neuro-cognitivos convergentes o comórbidos. Los títulos son traducidos textualmente, están en negrita y entrecomillados (copiados de MK) y los desarrollos de cada uno los hice, tomando en parte el concepto del autor y reformulandolo en función de las conductas problemáticas q vemos en niños que presentan trastornos diversos dentro del espectro de disfunciones neuro-cognitivas.
Por favor léalo atentamente y sin prejuicios. Yo se que tal vez Ud. ya probó muchas formas de intentar ayudar al niño y ninguna resulta o ninguna dura mucho tiempo. Ahora piense, elabore esto y evalúe cual o cuales de estas sugerencias Ud podría llegar a hacer con confianza y continuidad.
Estamos en contacto.

(Kids in the Syndrome Mix of ADHD, LD, Asperger´, Tourette´, bipolar and more, Martin I. Kutscher, UK, 2006)

1.- “PREPÁRESE MENTALMENTE PARA ENTENDER A ESTE NIÑO EN PARTICULAR”.
Tal vez se de cuenta de que algunas de sus creencias acerca de la conducta de los niños son distintas a como las pensaba.

Su hijo es único, y tal vez ni se parezca al hijo de la señora que “sabe tanto” de problemas de conducta de los niños y que le dice como actuar mientras espera a que su hijo salga de la escuela. Prepárese para entrar con su hijo en otros modos de ver la realidad y construir su propio mundo mental. Es decir, entrar en un universo en donde las leyes tal vez no sean las mismas que para los demás. Luego, si bien no se trata de que desoiga a los demás, si se trata de que no pretenda encontrar fórmulas cerradas.

2.- “trate de entender la mente de ESTE NIÑO con el que está tratando”.
Ya hemos visto que hay muchos niños que piensan y aprenden distinto, y de ese modo construyen su realidad y su forma de pensar y actuar de manera diferentes a la mayoría de sus pares. (y adultos de su entorno). Luego el desafío de los adultos es llegar a esa diferencia y meterse en ese modo de construir la realidad para poder comprender desde la individualidad y no desde la norma o la teoría general.

3.- “como ayudar a mejorar las conductas de ESTE NIÑO”.
Vamos a incluir algunas sugerencias generales para que lo ayuden a ud a pensar y encontrar el mejor modo de ayudar a su hijo o al niño a quien está educando, asistiendo o atendiendo terapéuticamente.

1.- “PREPÁRESE MENTALMENTE PARA ENTENDER A ESTE NIÑO EN PARTICULAR”.
LEA ESTAS SUGERENCIAS, PIÉNSELAS Y LUEGO RETÓMELAS EN DISTINTOS MOMENTOS. CHEQUÉELAS UNA VEZ QUE PUEDA IR ACOMODÁNDOLAS A SU HIJO O AL NIÑO A SU CUIDADO, EN APRENDIZAJE O EN TRATAMIENTO.

a.- “NO SOBRE ESTIME SU ROL EN LOS PROBLEMAS DEL NIÑO”:

b.- “RECUERDE QUE CUANDO UNO ES QUERIDO TIENDE TAMBIÉN A QUERER”:

c.- “NO TOME LOS PROBLEMAS DE CONDUCTA, COMO UN DESAFÍO O ATAQUE DEL NIÑO HACIA Ud.”

d.- “LA CONDUCTA INADECUADA DEL NIÑO, ES UN PROBLEMA QUE TIENE Y POR EL CUAL NECESITA AYUDA”

e.- “SI UD LOGRA UNA VISION REALISTA DEL NIÑO, VA A PODER MINIMIZAR SU FRUSTRACIÓN, COMO EDUCADOR, EN CUALQUIERA DE LOS ROLES EN LOS QUE TENGA QUE ACTUAR: PADRE, MAESTRO O TERAPEUTA”

f.- “PIERDA EL MIEDO A #AYUDARLO DEMASIADO#”

g.- “CONSTRUYA UNA RED DE SEGURIDAD”:

h.- “LA COMUNICACIÓN PERMANENTE ENTRE PADRES Y MAESTROS ES UNA CLAVE IMPORTANTE PARA EL MEJOR MANEJO POSIBLE DE LAS SITUACIONES”

i.- “SI ALGO FUNCIONA: SIGA HACIENDOLO”

j.- “OLVIDESE DE QUERER SER PERFECTO”:

k.- “LA ACTITUD DE LOS ADULTOS RESPONSABLES PUEDE HACER QUE EL CURSO DE LA VIDA DE UN NIÑO, PUEDA DEFINIRSE EN UNA TRAYECTORIA EVOLUTIVA PROGRESIVA”:

DESARROLLO DE LAS SUGERENCIAS CITADAS:
a.- “NO SOBRE ESTIME SU ROL EN LOS PROBLEMAS DEL NIÑO”:
muchas de las conductas del niño de quien estamos ocupándonos, tienen detonantes imprevisibles para nosotros. Y esta imprevisibilidad se extiende hasta que llegamos a conocerlo mas profundamente. Es decir que pueden ser cosas que le ocurren tal vez por la reactividad individual hacia situaciones comunes de vida diaria.

b.– “RECUERDE QUE CUANDO UNO ES QUERIDO TIENDE TAMBIÉN A QUERER”:
esto es un concepto fuerte en toda relación y cuando estamos frente a un niño, no olvidemos que el está resonando emocionalmente con nosotros, está, tal vez, sintiendo en si, lo que nosotros sentimos y percibiendo nuestro afecto, aceptación o rechazo. Los sentimientos que tenemos hacia él, tienen muchas probabilidades de ser generadores de los mismos sentimientos hacia nosotros.

c.- “NO TOME LOS PROBLEMAS DE CONDUCTA, COMO UN DESAFÍO O ATAQUE DEL NIÑO HACIA Ud.”:
el mundo de las cosas, personas (Ud incluido/a) y situaciones que vive son un desafio permanente para el niño. Pero un desafío que exige respuestas resolutivas. NO UN DESAFÍO PARA COMPETIR POR EL PODER DEL ADULTO. Si quieren seguir esa vía observen la dinámica de su conducta: tal vez busca el control de la situación (y entonces ahí es en donde los adultos podemos sentirnos desafiados), si, eso generalmente es, pero es el control para poder resolver. No para competir en términos jerárquicos. Y si él hace eso, es porque de otro modo no se siente en dominio y por lo tanto se estresa.

d.- “LA CONDUCTA INADECUADA DEL NIÑO, ES UN PROBLEMA QUE TIENE Y POR EL CUAL NECESITA AYUDA”:
con esto quiero insistir en el concepto de “perspectiva o mirada individual y empática”: individual para poder entender el lenguaje de su conducta, sus propios significados y sus intenciones probables. Y es empática porque para ello tenemos que situarnos en su propia perspectiva. Tenemos que hacer el esfuerzo de ponernos en sus zapatos, en su altura y en su lugar semiótico: ¿Cómo hace él para entender las cosas que pasan a su alrededor?, ¿tanto las que lo involucran como las que no?, ¿Desde donde mira, escucha, huele, percibe, significa y actúa?.

e.- “SI UD LOGRA UNA VISION REALISTA DEL NIÑO, VA A PODER MINIMIZAR SU FRUSTRACIÓN, COMO EDUCADOR, EN CUALQUIERA DE LOS ROLES EN LOS QUE TENGA QUE ACTUAR: PADRES, MAESTROS O TERAPEUTAS”
En lugar de lamentar su “supuesta incapacidad” para educar o poner límites o curar, Ud va a poder buscar tanto las causas como las motivaciones del niño en su actuar. Y en la medida en que pueda generar hipótesis ad-hoc, va a ir logrando hacer cosas que, si se quedara en la frustración, nunca encontraría.

f.- “PIERDA EL MIEDO A #AYUDARLO DEMASIADO#”:
el niño necesita ayuda luego Ud. se la dará en la medida en que él pueda requerirla, al tiempo que tambien va ayudándolo en su camino hacia la autonomía. Si el no tuviera problemas no sería parte de estas páginas que estamos escribiendo. Los problemas están y los adultos debemos encontrar las “prótesis” adecuadas a cada chico: sus recursos lo son en función de la complejidad del ambiente. Y nosotros somos parte del ambiente, está en nuestras manos hacerlo mas accesible para el niño, o no. Las prótesis se usan mientras son necesarias además de ser flexibles y ajustables a cada momento y necesidad de cada persona. Sepamos ayudar al niño que nos necesita y sepamos también desvanecer la ayuda para que poco a poco vaya valiéndose por si mismo.

g.- “CONSTRUYA UNA RED DE SEGURIDAD”:
él está expuesto en forma permanente a su propio fracaso. La red de seguridad y/o de contención apunta a adaptar los desafíos ambientales a los recursos del niño. Esta red de seguridad puede estar constituida por “maestros integradores” en la escuela, “acompañantes educativos o terapéuticos” en otros ambientes, por “pares sombra” que espontáneamente toman ese rol y ayudan al niño a salir airosos de las situaciones que tiene que enfrentan en un club, en un cumpleaños, etc. De todos modos, todo diseño de intervención puede ser ineficaz si la red de seguridad y contención no se ajusta adecuadamente al niño.

h.- “LA COMUNICACIÓN PERMANENTE ENTRE PADRES Y MAESTROS ES UNA CLAVE IMPORTANTE PARA EL MEJOR MANEJO POSIBLE DE LAS SITUACIONES”:
personalmente, vía mail, grupos de what´s-up, teléfono, cuaderno de comunicados, etc., en fin todo medio que pueda convenirse entre las partes (padres, maestros, terapeutas) es fundamental. La convergencia operativa o de acción es uno de los ejes principales del tratamiento: si se trabaja con organización visual, tal vez el diagrama de flujo sea un recurso insustituible para ayudar al niño a aceptar situaciones no previstas inicialmente por el. O bien el uso de tarjetas de auto-instrucción como por ejemplo las llamadas Power-cards, podrían ser de gran ayuda ante las dificultades de regulación emocional y conductual.

i.- “SI ALGO FUNCIONA: SIGA HACIENDOLO”:
pero manténgalo en observación. Tenga a mano un menú de opciones posibles, pues en los niños con SEED, es frecuente encontrar respuestas diferentes a las mismas condiciones ambientales..

j.- “OLVIDESE DE QUERER SER PERFECTO”:
valore lo que puede ir consiguiendo cada día y prepárese para el siguiente. Muchas veces nos vamos a encontrar con que estamos usando las actitudes supuestamente menos malas y que, aun así, son las únicas posibles en ciertos contextos y/o situaciones. Por ejemplo ante un berrinche en un shopping es muy poco viable usar los recursos que en su casa si son eficaces.

k.- “LA ACTITUD DE LOS ADULTOS RESPONSABLES PUEDE HACER QUE EL CURSO DE LA VIDA DE UN NIÑO, PUEDA DEFINIRSE EN UNA TRAYECTORIA EVOLUTIVA PROGRESIVA”:
empezamos este apartado diciendo que los adultos no debemos sobreestimar nuestro rol en la emergencia de las conductas de los niños. Y ahora estoy escribiendo algo que parece lo contrario. En fin, los adultos “no causamos” el problema que un niño puede tener. Pero si podemos ser parte de una “red motivacional” de actitudes y desempeños varios por parte de un niño. Y si podemos favorecer que los pasos evolutivos que vaya dando se vayan consolidando o sean inestables. Y esto es válido para los maestros cuando al poder “mirar” individualmente a un niño puede acertar con estrategias de enseñanza y vínculo que lo hagan “ganar el año”. Y también lo es, por supuesto, para los padres cuando a partir del uso de algunas prótesis y de algunos modelos vinculares y de ayuda progresiva pueden lograr que su hijo acceda a niveles de autonomía y bienestar que un tiempo antes parecían muy lejanos. Y ni hablar de lo que ocurre con los terapeutas: si podemos centrarnos en la individualidad del niño, corrernos de teorías y/o técnicas únicas y pensamos estratégicamente reformulando nuestras propias actitudes según sea la respuesta del niño, creo que estaríamos ayudando concretamente a su mejor evolución posible dentro de lo que le ocurre.

2.- “trate de entender la mente del niño con el que está tratando”.
Otra vez recuerde el concepto de ToCC, esa posible función que tenemos y nos permite anticipar y entender la conducta de los demás. Empecemos por darnos cuenta que muchos niños con SEED, tienen diferencias perceptuales y de construcción de la realidad que son diferentes a las de las personas que los rodean. Luego su conducta no es predecible con los parámetros que uno usa para entender la de otros niños.

a.- “INFORMESE ACERCA DE LA NATURALEZA DE LOS PROBLEMAS DEL NIÑO”

b.- “TRATE DE ENTENDERLO”

c.- EL NIÑO PUEDE LLEGAR A VER LAS COSAS DE MANERA TOTALMENTE DIFERENTE A UD.

d.- “TENGAMOS EN CUENTA QUE MUCHAS VECES LA CONDUCTA PUEDE SER EL RESULTADO DE COSAS OCURRIDAS EN OTROS LUGARES Y/O EN OTROS TIEMPOS”.

e.- “AUNQUE LAS CONDUCTAS RESULTEN INADECUADAS MUCHAS VECES, SON NORMALES, NO INTENTE VERLO TODO DESDE EL CRISTAL DE LA PATOLOGÍA”.

a.- “INFORMESE ACERCA DE LA NATURALEZA DE LOS PROBLEMAS DEL NIÑO”
Como ya comentamos varias veces antes y con distintas palabras y conceptos: el niño no está “decidiendo maliciosamente” portarse mal, en general. En este momento estamos hablando de niños que tienen diversas dificultades que les impiden tomar las decisiones adecuadas a las exigencias comunes de la vida diaria. Esto los hace actuar de manera disruptiva o discordante con el contexto social de desempeño. Luego no se trata de buscar, en todo caso solamente, los “motivos” por los cuales se comporta de ese modo, sino que tenemos que enfocar las posibles “causas” relacionadas con las funciones neuro-cognitivas que subyacen el desempeño humano. Ya hemos comentado arriba algunas variables posiblemente comprometidas en la toma de referencias y decisiones de estos niños.

b.- “TRATE DE ENTENDERLO”
Si convenimos en lo que venimos desarrollando, tendremos que tratar de entenderlo. Y tendremos que ponernos en su lugar. Tendremos que hacer el esfuerzo mental de imaginarnos a nosotros mismos con los rasgos que supuestamente tiene ese niño, e imaginar las posibles reacciones ante las distintas situaciones de la vida diaria.

c.- “EL NIÑO PUEDE LLEGAR A VER LAS COSAS DE MANERA TOTALMENTE DIFERENTE A UD”.
Esto necesariamente va a ser así y si logramos lo que le decía de ponerse en sus zapatos y ver el mundo desde su perspectiva se va a dar cuenta que distintas se ven las cosas según el lugar desde donde se miren. Cuando mi hijo Felipe tenía cuatro o cinco años, un día estábamos haciendo una fila para comprar en una feria y de pronto me dice: “vamos papá, acá hay mucho olor a culo”. Y claro, es lo que predominaba a la altura de su nariz.

d.- “TENGAMOS EN CUENTA QUE MUCHAS VECES LA CONDUCTA PUEDE SER EL RESULTADO DE COSAS OCURRIDAS EN OTROS LUGARES Y/O EN OTROS TIEMPOS”.
Esto es, creo, universalmente así. Pero en el caso de niños que son muy sistemáticos (cuyas representaciones son muy fijas) puede que ocurran comportamientos que no podemos explicar a partir de las variables que tenemos a mano en ese momento. Un niño lloraba intensamente cada vez que había algo que no era como esperaba, pero decía una frase: “el barquito se va, quiero el barquito”. Los padres contaban un episodio en el que perdieron un barquito que estaban haciendo navegar en un lago, y el niño quedó muy angustiado por ese episodio. Tanto que muchas veces cuando lloraba repetía esa frase.

e.- “AUNQUE LAS CONDUCTAS RESULTEN INADECUADAS MUCHAS VECES, SON NORMALES, NO INTENTE VERLO TODO DESDE EL CRISTAL DE LA PATOLOGÍA”.
Muchas de las conductas de los niños, tal vez sean comunes a cualquier niño. Las diferencias en general no vamos a encontrarla en la conducta en si misma, sino en las variables que las desencadenan o en la duración o en la intensidad. Las conductas de los niños se parecen, lo que en general es diferente es el modo de resolución.

3.- “como ayudar a mejorar las conductas de los niños”
Las dos reglas mas importantes para ayudar a redirigir la conducta de los niños, son:
1.- “SER POSITIVO”
2.- “ESTAR TRANQUILO”

1.- “SER POSITIVO”
Ser positivo, es intentar ponerse en sintonía con el niño. Pensemos que ese niño está hablándonos con actos mas que con palabras. Entendamos el idioma de los actos que nos agradan y de los que no nos agradan también. Si podemos entender los primeros estaremos en mejor posición para posicionarnos pro-activamente ante los segundos.

A.- “DISFRUTE CON EL NIÑO”

b.- “USE REFUERZOS POSITIVOS TODA VEZ QUE SEA POSIBLE”.

c.- “LOS CASTIGOS PUEDEN SER EFICACES PARA CIERTAS CONDUCTAS”, PERO EN GENERAL NO MEJORAN LA ACTITUD”.

d.- “EVITE ENTRAR EN EL ENGRANAJE DEL RESENTIMIENTO”.

e.- “NO SEA UN AUTORITARIO DESAGRADABLE”

f.- “EVITE LOS LLAMADOS CUATRO PECADOS CARDINALES”(Dr Phelam):
f1.- “NO SEA FASTIDIOSO”:
f2.- “NO DE SERMONES NI CONFERENCIAS”
f3.- “NO DISCUTA”
f4.- “NO INCLUYA TEMAS A CONVERSAR, FUERA DE PROGRAMA”:

g.- “EVITE LAS DISCUSIONES BASADAS EN EL MODELO “LA-CULPA-NO-ES-MÍA” (MODELO “EXCUSAS CON CULPAS AJENAS”)”

h.- “LLEVE UN INVENTARIO DE EXPERIENCIAS POSITIVAS, COMO UN VALOR DE REFERENCIA PERMANENTE”.

i.- “AYUDE Y/O BUSQUE COMPENSACIÓN ANTE EL DÉFICIT EN EL MOMENTO EN EL QUE SE REQUIERE SU ASISTENCIA”.

j.- “EL CASTIGO NO DEBE SER OCASIÓN PARA QUE Ud HUMILLE AL NIÑO”. “SI,DEBE SER EL MOMENTO EN EL QUE LE DAMOS UNA CHANCE PARA QUE PUEDA MEJORAR UNA DECISIÓN A TOMAR”.

a.- “DISFRUTE CON EL NIÑO”
Festeje su sentido del humor, su creatividad, etc. Busque compartir actividades o juegos para disfrutar y reir juntos. Descubra y re-descubra el mundo del niño detrás de su forma de actuar. Sígalo, imítelo, sintonice y sienta al mismo tiempo. Cree espacios en los que los significados se encuentran y las emociones se comparten (intersubjetivos). Ud va a descubrir que puede ser un buen interlocutor en las buenas y eso lo va a ayudar para afrontar las difíciles.

b.- “USE REFUERZOS POSITIVOS TODA VEZ QUE SEA POSIBLE”.
Cada vez que vea que hace cosas en forma correcta (cuando la mayoría de las veces no las hace así), refuércelo inmediatamente. Es interesante si puede implementar un sistema de fichas que al cabo de unos días (la cantidad de días depende de cada niño) él podrá cambiar por algo que le interesa mucho. De este modo Ud está enfatizando su intervención en los momentos en los que él hace cosas adecuadas, sociales y evolutivas. Su intervención no es entonces la de alguien que solo sanciona. Y pueden haber posibilidades de que las conductas reforzadas se consoliden. Esto de todos modos depende de la edad y las características de cada niño. Los refuerzos comunes pueden no ser eficaces. (ver en el próximo ítem).

c.- “LOS CASTIGOS PUEDEN SER EFICACES PARA CIERTAS CONDUCTAS, PERO EN GENERAL NO MEJORAN LA ACTITUD”.
Por un lado los castigos pueden tener validez para controlar una cierta modalidad de conducta inadecuada, pero no aseguran su automático reemplazo por la conducta adecuada. En todo caso un programa de refuerzo diferencial puede llegar a ser mas exitoso en los mejores casos. Pero cuando en el ítem anterior enfatizamos el refuerzo positivo: estamos reforzando una conducta externalizada, algo que el niño mostró que es capaz de hacer. Pero tambien advertimos que no siempre va a funcionar, porque el hecho de que haga algo en un lugar en ciertas circunstancias no asegura que eso mismo pueda reproducirlo en otro: aprende la lección y la dice excelente en casa pero luego en la escuela, al enfrentar a todos, fracasa. Aprende a tratarse con otros (hablar y no pegar) y lo hace bien mientras lo aprende pero cuando pasa a la situación real no lo logra. Por eso, el castigo funciona para la forma de la conducta pero no para el significado cuando el niño no está en condiciones de controlarla a su voluntad. Si trabajamos sobre las variables que juegan en las conductas por si o por no, es posible que de ese modo pueda mejorar la actitud.

d.- “EVITE ENTRAR EN EL ENGRANAJE DEL RESENTIMIENTO”.
El resentimiento genera resentimiento: las actitudes controladas por él van a seguir alimentándolo. Y esto va a consolidar circuitos de rechazo mutuo y conductas cada vez mas hostiles que tienen altas probabilidades de generalizarse a otros que no son parte del engranaje del resentimiento. Así como dijimos que tendemos a amar a quienes nos aman, lo contrario también es posible que ocurra. Las conductas inadecuadas del niño, serán parte de la historia que registramos de él, pero no necesariamente tendremos que tomarlas como predictores de conductas futuras. Y, si bien las consideraremos como datos fuertes a tener en cuenta, tendremos que ser capaces de evitar expectativas negativas. Muchos niños son muy sensibles al rechazo de los demás, están tan acostumbrados que ya aún las pequeñas actitudes son leidas en clave de rechazo o desagrado hacia ellos, con la consiguiente reacción.

e.- “NO SEA UN AUTORITARIO DESAGRADABLE”
Es muy difícil que cuando un niño hace algo inadecuado, uno como adulto pueda mantenerse neutral o amable. Tendemos a reaccionar con la misma valencia que leemos en la conducta del otro. Y luego tendemos a ser autoritarios, levantar la voz, decir palabras humillantes y mostrar actitudes gestuales corporales y faciales de enojo y rechazo. Tal vez podemos tener éxito en el momento para controlar una conducta en particular. Tal vez podamos pensar que si el niño no repite su conducta en presencia nuestra, tuvimos éxito en nuestra actitud. Pero es muy probable que hayamos perdido muchos créditos en la posibilidad de ser sus referentes en situaciones positivas. Y peor aún veamos que en presencia de otros esa misma conducta sigue produciéndose. Solo conseguimos tranquilidad para nosotros, pero no ayudamos al niño a cambiar.

f.- “EVITE LOS LLAMADOS CUATRO PECADOS CARDINALES” (Dr. Phelan, 1994, p.39, citado por Kutscher et al):
f1.- “NO SEA FASTIDIOSO”:
Si no tiene nada agradable para decir, no diga nada. “No hable de mas”. Fíjese que muchas veces las frases que parecen neutras pueden desencadenar una tormenta en el niño. Y la pregunta que uno se hace es ¿Qué le dije para que se ponga así?. Y uno se pone a hurgar en el contenido de la frase, sin darse cuenta que el problema no está en saber cuál es el contenido sino en la “falta de contenido mismo”. Tal vez Ud lo irrumpió en sus pensamientos con algo sin ningún sentido para él.
f2.- “NO DE SERMONES NI CONFERENCIAS”:
El niño va a dejar de atender y entender toda vez que uno “hable demasiado”. Es mucho mas eficaz dar un par de instrucciones muy claras y cortas. Cuando sea necesario.
f3.- “NO PELEE”:
ninguna pelea se va a desencadenar sin su consentimiento. Si uno decide no pelear, no va a pelear. Muchas discusiones verbales terminan en auténticas peleas y generan engranajes de resentimiento.
f4.- “NO INCLUYA TEMAS A CONVERSAR, FUERA DE PROGRAMA”.
Por ejemplo interrumpir al niño en su juego para que le cuente como le fue en la escuela o para que le diga como van a formar el equipo para el partido del sábado con sus amigos del club. Hay otros momentos en los que esos mismos temas puedes dar para conversar, si él esta en otra cosa van a ser causa de malestar, insultos y peleas.

g.- “EVITE LAS DISCUSIONES BASADAS EN EL MODELO “LA-CULPA-NO-ES-MÍA” (MODELO “EXCUSAS CON CULPAS AJENAS”)”
K pone una viñeta interesante sobre un niño que llega tarde a su casa y explica que fue por motivos ajenos a él, se pone a contarlos, etc. Y lo interesante que K enfatiza es que uno como adulto puede empatizar con la historia de motivos que escucha, pero que la ruptura del acuerdo o pacto acerca de la hora de llegar ya se produjo, luego las consecuencias anunciadas se cumplirán. De ese modo intentamos neutralizar la evasión de la responsabilidad y la costumbre de culpar a otros de sus propias dificultades. Es decir primero nos ocupamos del resultado final y luego eventualmente podríamos llegar a ver como podría actuar en otra ocasión ante las cosas que refiere que le pasaron.

h.- “LLEVE UN INVENTARIO DE EXPERIENCIAS POSITIVAS, COMO UN VALOR DE REFERENCIA PERMANENTE”.
K usa una metáfora interesante: llevar una “cuenta bancaria relacional positiva”, algo así como un registro de experiencias relacionales con el niño, tratando de darles un giro positivo aún a las que inicialmente pudieran ser negativas. Es interesante para que podamos cubrirnos de caer en el el “engranaje del resentimiento”.

i.- “AYUDE Y/O BUSQUE COMPENSACIÓN ANTE EL DÉFICIT EN EL MOMENTO EN EL QUE SE REQUIERE SU ASISTENCIA”.
Si el niño está en el aula vamos a hacer un inventario de desempeño comparativo para verlo en perspectiva dentro del grupo de pares y de ese modo orientar la exploración de sus dificultades. Tal vez sea necesario usar, como ya expusimos en otro lugar acá mismo, claves visuales de organización de la actividad, tarjetas de auto-control, diagramas para la aceptación de cambios y manejo de transiciones, etc. En todos los casos es necesario que los adultos sean capaces de entender que el niño necesita estas prótesis para poder responder a las exigencias del medio. La compensación es una prótesis a usar todo el tiempo en el que se manifieste la dificultas..

j.- “EL CASTIGO NO DEBE SER OCASIÓN PARA QUE Ud HUMILLE AL NIÑO.
En cambio: SI DEBE SER EL MOMENTO EN EL QUE LE DAMOS UNA CHANCE PARA QUE PUEDA MEJORAR UNA DECISIÓN A TOMAR”.
El castigo no puede ser la externalización de su bronca o frustración ante la conducta del niño, si esto es así: Ud YA FRACASÓ. El castigo es una oportunidad para que le de un modelo diferente de comportamiento: Ud. le devuelve al niño una consecuencia de su conducta que sea desagradable para él y que pretende ser un modelo social. En el momento en el que Ud lo hace, está intentando que su hijo empiece a firmar el contrato social propio de su cultura. Ud responde de manera atenuada ante una situación en la que la sociedad podría ser mucho mas rigurosa. Esto es aducativo.

2.- “ESTÉ TRANQUILO”.
Aunque no lo parezca, los adultos somos muy importantes para el niño, somos objeto de atención por parte de él y es muy probable que él/ella conozca nuestras posibles reacciones mucho antes que nosotros mismos lo sepamos. Nuestra tranquilidad, puede ser “contagiosa”, a través de nuestros tonos y volumen de voz, nuestras gesticulaciones y las actitudes que tengamos hacia el niño. Estar tranquilo ante los desajustes del niño crea el mejor ambiente para la resolución exitosa de los mismos.

a.- “DESCOMPRIMA LA SITUACIÓN. NO LA HAGA MAS GRANDE CON SU ACTITUD”.

b.- “DESVÍE LA PELEA ANTES QUE EMPIECE”.

c.- “ELIJA SUS PELEAS”

d.- “ASISTALO EN LAS TRANSICIONES”

e.- “ÁRMESE UN “ESTRESÓMETRO”

h.- “LISTO”: “ES LA CLAVE PARA ALIVIAR A UNA PERSONA AGOBIADA Y AÚN PARA UD MISMO/A”.

i.- “PERMANEZCA TRANQUILO”

a.- “DESCOMPRIMA LA SITUACIÓN. NO LA HAGA MAS GRANDE CON SU ACTITUD”.
Por las características del niño hay muchas probabilidades de que las interacciones sean conflictivas en 9 de cada 10 situaciones (esto es una metáfora, no es un dato medido). Su actitud relajada, atenta y segura puede es una referencia importante para el niño.

b.- “REDIRIJA EL CONFLICTO POSILE A FIN DE PODER EVITAR EL INICIO DE UNA PELEA”.
Ud tiene el trabajo de detectar las distintas situaciones en las que el niño está iniciando una interacción con desenlace negativo. Ejemplo: Josi tira pataditas desde el sofá desde donde mira dibujitos cada vez que lo llaman a comer. En lugar de llamarlo a comer, su papá comenzó a decirle: “a ver esas pataditas”, en tono jocoso le agarra sus piernas y le hace hacer bicicleta, se divierten unos minutos y luego van a comer. Al principio el televisor lo apagan después que el se sentó a comer. Y al final ya el mismo niño lo apaga y va solo a comer. Lo que antes era una situación caótica familiar, se transformó en un momento en el que con la sincronización de la hora de la comida al final de un dibujito y unos minutos de “bicicleta” se logró una buena cena de toda la familia. Las pataditas desaparecieron, aparecieron otras conductas mas funcionales y positivas que compitieron con ellas y ganaron. Corregir conductas no necesariamente es sancionar.

c.- “ELIJA LOS TEMAS Y SITUACIONES SOBRE LOS CUALES PODER INTERCAMBIAR O DISCUTIR”.
Si Ud. ya vio que el niño cree que los reyes solo dejan los regalos si los zapatitos están ubicados en el lavadero de su casa, y que cada vez que Ud quiere cambiarlos de lugar el se enoja y parece entrar en pánico, sin aceptar ninguna de sus razones, y que además exige que los de sus hermanos también estén en el lavadero, vea como puede adaptarse a eso. Lo interesante es que años después el niño decía que tenía terror a los camellos y a que alguno se metiera en su cuarto, cuando los reyes dejaban los juguetes. Los adultos discutimos con las referencias de los adultos y en general nos cuesta mucho entender las de los niños (ver arriba, ponerse en sus zapatos). Cuando las referencias son diferentes, las razones de unos son tan valederas como las de los otros. Las discusiones tienen resultado cero tendiendo a negativo en estos casos.

d.- “ASISTALO EN LAS TRANSICIONES: CAMBIAR DE UNA ACTIVIDAD A OTRA”.
Imagínese que ud está muy ocupado en una actividad y luego tiene que pasar a otra, pero le cuesta desengancharse, dejar de lado lo que estaba pensando y/o haciendo para ocuparse de otra cosa. Pero Ud no decide el cambio, lo deciden por Ud y no tiene entonces, chances para enfocarse en la situación nueva, De pronto se encuentra con una serie de estímulos o sucesos que ocurren sin que pueda seguirlos: ¿se sentirá perdido?, ¿confuso?, ¿molesto?. Sea como sea el problema del niño es no poder acomodarse a la nueva situación y perder el ritmo. las conductas que surgen de eso, pueden ser disruptivas y ese será el problema que vemos los adultos. Si podemos anticipar, preparar y darle tiempo a que procese la nueva info, los cambios serán asimilables y las conductas previsibles.

e.- “ÁRMESE UN ESTRESÓMETRO”:
Cuando vamos conociéndolo empezamos a detectar las señales de distinto tipo de reacciones y secuencias conductuales. Lo interesante es que cuando el niño va creciendo estas señales puede detectarlas él mismo y puede empezar a prepararse para aprender recursos de autocontrol.

f.- “LISTO”: “ES LA CLAVE PARA ALIVIAR A UNA PERSONA AGOBIADA Y AÚN PARA UD MISMO/A”.
Con tono de voz firme y volumen coloquial, la palabra: LISTO!, puede ser una señal de confianza por parte de una persona que se pone frente al niño con actitud tranquila y continente. Con muchos niños esto funciona asombrosamente bien. Con otros tantos, esto no parece ni siquiera ser notado por el niño. El concepto es trasmitirle un mensaje de tranquilidad y continencia sin confrontación ni enojo. La respuesta o la rapidez de la misma depende de la intensidad de la reacción conductual del niño.

g.- “PERMANEZCA TRANQUILO”
leamos atentamente todo esto que hemos escrito, basados en los consejos de Kutscher, intentemos cambiar nuestra cabeza en cuanto al significado posible de las conductas de los niños y aunque nos cueste practiquemos hasta que nos salga una actitud sincera de ayuda a un niño que está sufriendo y necesita de nuestra comprensión y apoyo para salir de eso.